Los detenidos en una prisión de Bahrein han anunciado que han iniciado una huelga de hambre para protestar por sus condiciones de detención, denunciando en particular el confinamiento en celdas durante 23 horas y las restricciones impuestas a la oración.
Los presos de la prisión central de Jau en el sur del reino, hogar de muchos bahreiníes condenados o juzgados por participar en un movimiento de protesta en 2011, anunciaron su acción en un comunicado emitido el lunes por el principal grupo de oposición, Al-Wefaq.
Afirman estar encerrados en sus celdas durante 23 horas al día y exigen atención médica, acceso a la educación y permiso para rezar juntos en la mezquita de la prisión.
El Instituto de Bahrein para los Derechos y la Democracia (BIRD), con sede en Gran Bretaña, dijo el jueves que “cientos de presos políticos” estaban participando en el movimiento.
“Durante muchos años, los presos políticos han soportado un trato degradante y un confinamiento prolongado en celdas, y se les ha negado sistemáticamente atención médica”, dijo Sayyed Ahmed Alwadaei, director de BIRD.
“Estoy preocupada por la vida de mi padre”, dijo el jueves a AFP Mariam al-Jawaya, cuyo padre ha estado detenido durante 12 años y se dice que se le niega tratamiento médico. “No quiero que mi padre nos sea devuelto en un ataúd”.
Bahrein, un pequeño reino del Golfo, está gobernado por la dinastía Al-Jalifa y poblado principalmente por musulmanes chiíes.
El país se ha visto sacudido por disturbios esporádicos desde la represión de 2011, tras la Primavera Árabe, de un movimiento de protesta popular que exigía una reforma política.
Sede de la Quinta Flota de EEUU, Bahrein es un aliado de las potencias occidentales, pero las ONG lo acusan regularmente de “graves violaciones” de los derechos humanos y “actos de tortura” contra los opositores encarcelados.
Source: Diversas