El gobierno palestino condenó este jueves la sistemática ampliación y construcción de asentamientos israelíes en los territorios ocupados, lo cual viola varias resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
El Ministerio de Relaciones Exteriores y Expatriados afirmó en un comunicado que esa estrategia significa una guerra abierta contra el pueblo palestino.
También criticó la escalada de ataques de los colonos judíos contra los palestinos, sus tierras, ganado, propiedades y lugares sagrados en Cisjordania, incluida la zona oriental de la ciudad de Jerusalén.
La profundización y expansión de los asentamientos es un sabotaje deliberado a cualquier oportunidad de establecer el Estado de Palestina sobre el terreno y una violación de las normas internacional, denunció la Cancillería.
Asimismo, cuestionó el silencio de la comunidad internacional ante los crímenes israelíes.
Hace dos días el ministerio rechazó los planes de la vecina nación para judaizar la zona oriental de la ciudad de Jerusalén.
Asimismo, condenó las sistemáticas restricciones israelíes a los fieles para visitar sus sitios sagrados tanto cristianos como musulmanes.
Consideró esas medidas como “una extensión de una política colonial encaminada a imponer un mayor control sobre los lugares sagrados y el acceso a los mismos”.
Source: Prensa Latina