Más de 220 académicos de catorce países latinoamericanos han denunciado a las autoridades israelíes por imponer un sistema de opresión y dominación contra los palestinos, afirmando que “Israel” debe ser calificado como un régimen de apartheid.
Los académicos prometieron en una declaración conjunta que no participarían en ningún intercambio académico con instituciones israelíes y rechazarían la financiación de “Israel”, según informó la Campaña Palestina para el Boicot Académico y Cultural de “Israel” (PACBI).
Luego, los firmantes llamaron a las universidades latinoamericanas a suspender la cooperación con los centros educativos israelíes, que están contribuyendo a la ocupación militar del régimen y al crimen de apartheid contra los palestino hasta que el régimen de Tel Aviv respete los derechos políticos y humanos de todo el pueblo palestino, según lo estipulado por las Naciones Unidas.
Entre los firmantes se encuentran el antropólogo afrodominicano Ochy Curiel, el antropólogo colombiano Arturo Escobar, los historiadores chilenos Igor Alexis Goicovic Donoso y Sergio Grez Toso, la artista chilena Ingrid Wildi Merino, así como la filósofa argentina Silvana Rabinovich.
A principios de este mes, al menos 277 grupos de derechos humanos y organizaciones de la sociedad civil denunciaron a funcionarios israelíes por imponer un sistema de apartheid a los palestinos.
Las organizaciones, que procedían de 16 países árabes así como de seis estados europeos y latinoamericanos, exigieron en un comunicado conjunto el juicio de las autoridades israelíes implicadas en la perpetración de un genocidio, crímenes de guerra y discriminación racial contra los palestinos.
Condenaron las prácticas racistas de “Israel” contra los palestinos y su trato a estos últimos como un grupo racial inferior, y pidieron el lanzamiento de una campaña para poner fin a las acciones de apartheid del régimen.
Las organizaciones de derechos humanos también pidieron medidas punitivas, incluidas prohibiciones de viaje y congelación de activos, contra los oficiales militares israelíes, además de embargos de armas contra el régimen de Tel Aviv.
Hicieron también un llamamiento al Tribunal Penal Internacional (TPI) para que incluya los crímenes del apartheid en el Territorio Palestino Ocupado en sus futuras investigaciones.
Luego, las organizaciones expresaron su apoyo a los grupos pro-palestinos que documentan y exponen las atrocidades y el racismo de “Israel”, sobre todo el movimiento internacional de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS).
El movimiento BDS, que sigue el modelo del movimiento contra el apartheid en Sudáfrica, fue iniciado en 2005 por más de 170 organizaciones palestinas que presionan en favor de “diversas formas de boicot contra “Israel” hasta que cumpla con sus obligaciones bajo el derecho internacional”.
Desde entonces, miles de voluntarios de todo el mundo se han unido al movimiento BDS, que llama a personas y grupos de todo el mundo a cortar los lazos económicos, culturales y académicos con Tel Aviv para ayudar a promover la causa palestina.
Source: Press TV