Irán ha reiterado su pleno apoyo a los palestinos contra las atrocidades del régimen de Tel Aviv, y ha pedido a las naciones musulmanas y a toda la comunidad mundial que tomen medidas inmediatas y prácticas para poner fin a décadas de ocupación israelí.
El Ministerio de Relaciones Exteriores iraní emitió un comunicado el jueves en vísperas del Día de Nakba (el Día de la Catástrofe), que conmemora lo ocurrido en 1948, cuando cientos de miles de palestinos fueron desalojados por la fuerza de su tierra natal e “Israel” proclamó su existencia.
“Hace 72 años, en este día, los inmigrantes sionistas masacraron a cientos de miles de personas en la tierra de Palestina, incluidos hombres, mujeres, jóvenes y ancianos inocentes, y los obligaron a abandonar sus hogares mientras aplicaban sus ideas desviadas y racistas. (Así es como) la tierra palestina y toda Asia Occidental se vieron afectadas por la Nakba sionista”.
Los palestinos celebran el Día de Nakba el 15 de mayo, un día después de que el régimen de ocupación declarara su existencia.
El Ministerio de Relaciones Exteriores iraní describió el Día de Nakba como el punto de partida de los crímenes israelíes contra los verdaderos propietarios de Palestina, incluida la construcción de asentamientos, el desplazamiento de los palestinos, la profanación de la Mezquita de Al Aqsa, el mantenimiento de un bloqueo devastador contra Gaza y la anexión de la parte ocupada de los Altos del Golán sirios.
La declaración también censuró los nuevos intentos del régimen israelí, apoyados por EEUU, para anexionar más tierras palestinas.
El ministerio expresó la “plena solidaridad” de Irán con la causa palestina, rechazando un plan de paz “humillante” elaborado por la administración del presidente estadounidense Donald Trump para poner fin al conflicto israelo-palestino.
También enfatizó que los organismos internacionales, especialmente las Naciones Unidas, deben asumir su responsabilidad y “preparar el escenario para el regreso de los refugiados palestinos a su tierra natal y un referéndum al que se unan los verdaderos habitantes de esta tierra, incluidos musulmanes, cristianos y judíos, para que puedan ejercer el derecho a decidir su propio destino y formar un gobierno palestino independiente con Al Quds como la capital (del estado)”.
El ministerio se refirió a Palestina como el tema más apremiante del mundo musulmán “a pesar de todas las conspiraciones para hundirlo en el olvido”.
El ministerio reiteró la postura “inmutable” de Irán hacia Palestina, y pidió a la “Organización de Cooperación Islámica (OIC), las naciones y gobiernos musulmanes, además de las otras naciones que buscan la libertad, que tomen medidas efectivas para apoyar a los palestinos (en sus esfuerzos) por liberar sus tierras”.
En el transcurso de casi tres años y medio desde que llegó al poder, la administración Trump ha adoptado un enfoque agresivo contra los palestinos y en favor del régimen israelí.
Desafiando las protestas internacionales, el presidente de EEUU anunció en enero las disposiciones generales del plan de “paz” de la Casa Blanca con el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, a su lado.
El plan, que todos los grupos palestinos han rechazado por unanimidad, cumple en gran medida las demandas de “Israel” en el conflicto de décadas de antigüedad, al tiempo que aboga por un estado palestino con control limitado sobre su propia seguridad y fronteras.
Consagra a Al Quds (Jerusalén) como “la capital indivisa de Israel” y permite al régimen anexionar los asentamientos en Cisjordania ocupada y el Valle del Jordán, entre otros términos.
Los líderes palestinos, que cortaron todos los lazos con Washington a fines de 2017 después de que Trump reconoció a Al Quds como la capital del régimen israelí, rechazaron de inmediato el plan y el presidente palestino, Mahmud Abbas, dijo que “pertenece al basurero de la historia”.
Source: Press TV (traducido por el sitio de Al Manar en español)