Un general israelí reconoció que el Estado iraní disfruta de una estabilidad notable y no se ha debilitado a pesar de lo que algunos dicen.
Según el diario en línea Rai al Youm, “muchos analistas políticos creen que el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, continúa sus esfuerzos para consolidar las relaciones entre Tel Aviv y algunos países árabes, incluidas las monarquías del Golfo Pérsico, con el fin de obtener beneficios políticos para las próximas elecciones programadas para mayo”.
Para comprender las dificultades de Israel para normalizar las relaciones con los países árabes, se debe prestar atención a las posiciones de Yair Golan, el ex jefe adjunto del Estado Mayor del Ejército israelí. Él dijo que Israel debe actuar con precaución con respecto los países árabes del Golfo Pérsico. “No debemos confiar en estos países porque no comparten los mismos valores que los nuestros”, dijo.
Yair Golan reiteró que la importancia de la mejora de las relaciones entre Israel y las monarquías árabes del Golfo Pérsico no debe ser exagerada y cree que las posiciones de los gobernantes de esos países no reflejan las de la población.
“Podríamos compartir algunos intereses con Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Omán y otros emiratos de esta región, pero no compartimos los mismos valores. No debemos exagerar la importancia de estas relaciones, aunque sean relevantes”, dijo el ex jefe de personal adjunto del ejército israelí.
Los comentarios de Yair Golan resaltan las disputas entre los centros de decisión en Tel Aviv. Yair Golan había señalado previamente que el destino de Israel se determinaría en Gaza, Ramalá y Tulkarem y no en Beirut, Damasco o Teherán.
“Contrariamente a lo que algunos dicen sobre el debilitamiento de Irán y el estado iraní debido a las sanciones de EEUU, el Estado iraní se mantiene estable y firme y no hay señales de temblores”.
Source: Medios israelíes