La lista “Desarrollo y Lealtad” ganó las elecciones municipales en Baalbek en su totalidad. No fue una victoria fácil para la ciudad, que sufrió el peso de la batalla política más encarnizada en la Gobernación de Baalbek-Hermel. La batalla la libró la alianza Hezbolá-Amal contra la maquinaria respaldada por Arabia Saudí y algunas fuerzas afiliadas a ella desde fuera de la ciudad, que se unieron tras la lista “Baalbek, Mi Ciudad”.
Tras la devastadora guerra librada por el enemigo israelí contra el Líbano, y en particular contra el entorno de Hezbolá, algunos partidos externos, en concreto Arabia Saudí, se unieron a la alianza este año, en un intento de cambiar el ánimo general en la ciudad trantando de impedir que poderosos sunníes se unieran a la lista del dúo.
Tras interferir en las alianzas, Arabia Saudí y sus aliados intervinieron posteriormente con dinero electoral, comprando votos e intentando sobornar a los residentes de la ciudad con raciones y ayuda en especie, lo cual se agravó en la última semana previa a las elecciones. Entre los sobornos y las raciones, las tensiones sectarias se intensificaron en la ciudad, con varios jeques reclutados para predicar en mezquitas sobre el “pecado” de votar por la lista apoyada por el dúo.
La presión sobre los residentes de la ciudad, impulsada por el “fervor religioso”, continuó hasta las elecciones de ayer, que se convirtieron en una batalla crucial. Formalmente, los colegios electorales estuvieron abarrotados de votantes desde primera hora de la mañana. En esencia, el referéndum trataba sobre quién era el más fuerte en la ciudad, como lo demostró la participación electoral sin precedentes. En contraste con la tímida participación de los votantes sunníes en Beirut y, antes de eso, en Trípoli, su tasa de participación en algunos colegios electorales de Baalbek superó el 70 %.
Sin embargo, nada de esto se tradujo en una victoria en las urnas. La diferencia entre los ganadores finales de la lista “Desarrollo y Lealtad” y los primeros perdedores de la lista “Baalbek, mi ciudad” fue de aproximadamente 5.600 votos, tras el recuento de 47 urnas.
No lejos de la batalla de Baalbek, la ciudad de Douris fue testigo de otra batalla política entre las Fuerzas Libanesas, que apoyaban a la lista “Familias de Douris”, por un lado, y la Corriente Patriótica Libre, Hezbolá y Amal, que apoyaban la lista “Hijos de Douris”, por otro. Quizás el elemento más importante en esta batalla fue el voto cristiano, que las Fuerzas se esforzaron por conquistar mediante la intimidación… y los regalos. Estos últimos lograron fortalecer la presencia cristiana en las elecciones, alcanzando el 45% de los votantes cristianos, a diferencia de lo que había ocurrido anteriormente, cuando el porcentaje no superaba el 30% en el mejor de los casos.
Sin embargo, esto no llevó a la lista “Familias Douris” a la victoria ni a superar a la lista opositora, ya que no logró alcanzar el voto chií, cuya participación superó el 57%. Esto es especialmente cierto dado que el número de votantes chiíes fue igual al de cristianos (1.300 votos para cada uno), además de 1.000 votos de votantes sunníes, el 50% de los cuales votaron por la lista apoyada por el dúo, que anunció su victoria anoche temprano.
Esta victoria también se contabiliza dentro de la canasta del dúo en la gobernación de Baalbek-Hermel, además de ser contabilizada como una victoria para la Corriente Patriótica Libre, cuyos votos inclinaron la balanza a su favor en Douris.
Con la excepción de estas dos batallas, las aldeas de la gobernación de Baalbek-Hermel, bastión de Hezbolá y la Corriente o aquellas con un componente predominantemente shií, no experimentaron ninguna batalla política. Los enfrentamientos que tuvieron lugar en varias aldeas se limitaron a dos listas completas dentro de un marco puramente familiar y, por lo tanto, no se desviaron del apoyo a la resistencia. Lo sorprendente de estos enfrentamientos es que ambos bandos adoptaron las consignas de la resistencia y libraron la batalla con ellas en un intento de influir en sus electores y atraer sus votos a las urnas.
En la ciudad de Hermel y en todo el distrito, la votación por las listas se convirtió en un referéndum para los partidarios de la resistencia. Aunque es prematuro hablar de los resultados electorales definitivos en Hermel, los indicadores sugieren que la diferencia entre el último ganador de la lista del dúo y el primer perdedor de la lista contraria superó los 3.000 votos.
84 municipios de la gobernación de Baalbek-Hermel están bajo control del dúo. Aparte de los que ganaron sin oposición a favor de las listas de “Desarrollo y Lealtad”, este proceso continuó con la victoria de todas las listas de “Desarrollo y Lealtad” en todas las localidades donde se produjeron conflictos, ya fueran políticos, como en la ciudad de Baalbek, o familiares, como en la mayoría de las aldeas. Esto es una señal de buena salud, según quienes siguen los asuntos municipales del dúo, y es una señal que se consolidará en las elecciones parlamentarias de 2026.
Source: Al-Akhbar - Al-Manar