La familia de un trabajador humanitario británico asesinado en un ataque israelí en la asediada Franja de Gaza en abril ha pedido una investigación independiente sobre las circunstancias que rodearon su muerte.
En un comunicado publicado el miércoles, la familia de James Kirby pidió una “investigación adecuada e independiente sobre este ataque a trabajadores humanitarios inocentes”.
Describiendo su muerte como un asesinato, la familia dijo que “todavía estamos luchando por encontrar respuestas y rendición de cuentas por lo que sucedió”.
“Debe haber una investigación independiente adecuada sobre el ataque a trabajadores humanitarios inocentes y para que la evidencia sea evaluada por un tribunal relevante”.
La familia dice que no han tenido contacto con el gobierno del Reino Unido desde la muerte de los trabajadores humanitarios ni han recibido “ninguna evidencia de si se está llevando a cabo una investigación independiente creíble o sobre los resultados de cualquier investigación si se ha llevado a cabo”:
La familia dice que esto no se trata solo de ellos, sino de cómo se trata a las familias. “Se trata de cómo Gran Bretaña cuida a sus propios ciudadanos y sus familias, cuando un ciudadano británico ha sido asesinado ilegalmente”.
“Simplemente decir “lo siento, fue un accidente’”no es suficiente. Necesitamos saber que ha habido rendición de cuentas a todos los niveles para que no vuelva a suceder”, decía la declaración.
James Kirby estaba entre los siete trabajadores humanitarios de World Central Kitchen (WCK), incluidos los británicos John Chapman y James Henderson, que murieron cuando un ataque aéreo israelí tuvo como objetivo su vehículo claramente marcado el 1 de abril.
Kirby y los otros dos británicos muertos formaban parte del equipo de seguridad que acompañaba a los trabajadores humanitarios empleados por la organización benéfica con sede en EEUU.
Además de los tres británicos, la ciudadana australiana Lalzawmi Frankcom, el ciudadano polaco Damian Sobol, el palestino Safiddin Issam Ayad Abutahas y el ciudadano estadounidense-canadiense Jacob Flickinger murieron en el ataque mortal.
Todos los que estaban en el convoy murieron después de que se dispararan tres misiles durante cinco minutos.
Los operadores de drones israelíes siguieron disparando contra el convoy después del ataque inicial.
Benyamin Netanyahu admitió que las fuerzas de ocupación habían matado a los trabajadores humanitarios en la Franja de Gaza, diciendo: “Sucede en tiempos de guerra”.
Source: Press TV (traducido por el sitio de Al Manar en español)