El fiscal público de Beirut, el juez Raja Hamoush, acusó al gobernador del Banco Central, Riad Salameh, a su hermano Raja y a su asistente Marianne Howayek, de delitos de malversación de fondos públicos, falsificación, enriquecimiento ilícito, lavado de dinero y violación de la ley fiscal.
El juez Hamoush remitió el expediente y a los acusados al primer juez de instrucción de Beirut, Charbel Bou Samra, y exigió que fueran interrogados y que se emitieran las órdenes judiciales necesarias contra ellos.
Mientras tanto, Salameh rechazó todos los cargos y afirmó que la persona es inocente hasta que se pruebe su culpabilidad.
La jueza fiscal del Monte Líbano, Ghada Aoun, también desestimó las órdenes del primer ministro interino Nayib Mikati, quien pidió al ministro del Interior, Bassam al-Mawlawi, que tomara medidas legales contra ella y acusó a la jueza de negarse a recibir avisos de recusación y de usurpar el poder.
El Consejo Superior de la Judicatura, por su parte, instó a Mikati a anular la orden contra Aoun, reiterando el principio de separación de poderes.
Source: Agencias (traducido por el sitio de Al Manar en español)