Hace más de tres décadas, 27.000 soldados estadounidenses, apoyados por aviones de combate, tanques y artillería pesada, invadieron el país centroamericano de Panamá, matando a miles de personas, incluidas mujeres y niños.
Por primera vez este año, el aniversario de la invasión estadounidense de 1989 para derrocar al gobierno de Manuel Antonio Noriega fue marcado como el “Día de Luto Nacional” en Panamá.
El presidente Laurentino Cortizo dijo el martes en una ceremonia a la que asistieron unos 300 familiares de las víctimas, funcionarios gubernamentales, diplomáticos, militares y activistas que todos deben orar por los muertos y tratar de seguir adelante.
En el aniversario de la invasión estadounidense a Panamá, la bandera nacional fue colocada entre hileras de placas de mármol en el cementerio Jardín de la Paz de Ciudad de Panamá, donde reposan los restos de decenas de fallecidos el 20 de diciembre de 1989.
Las tropas estadounidenses acudieron a expulsar del poder a Noriega, buscado por un tribunal de Miami por cargos de narcotráfico.
Entre los muertos enterrados en el Jardín de la Paz se encuentran niños como Tomás Palacios, quien tenía solo 10 años cuando murió.
Se dice que al menos 200 de los muertos eran civiles.
“El tiempo no ha terminado de curar esta herida”, dijo Trinidad Ayola, representante de las familias que perdierona seres queridos.
Source: Press TV (traducido por el sitio de Al Manar en español)