El diario Rai al-Youm escribe que un alto general estadounidense está pidiendo a la administración Biden que amplíe la cooperación en materia de seguridad entre “Israel” y Marruecos para contrarrestar lo que él llama la “influencia maligna” de China, Rusia e Irán a través de Argelia en África.
Aconseja reforzar la capacidad militar-industrial de Rabat y modernizar el ejército marroquí en las maniobras de “León Africano” y propone una hoja de ruta para una situación que va más allá del “liderazgo estratégico en la región”.
El mes pasado, el Comando de EEUU en África realizó su primer ejercicio multilateral “León Africano 22”, en el que participaron 7.500 efectivos de 10 países del Magreb y África Occidental. Este año, los primeros ejercicios liderados por el AFRICOM estadounidense fueron reforzados con fuerzas del ejército israelí. “El mayor fortalecimiento de la asociación israelo-marroquí, que fue posible gracias a los Acuerdos de Abraham de 2020, permitirá a EEUU incrementar su presencia estratégica en África”, señala.
El periódico agregó: “África se ha convertido en un eje central del equilibrio de poder estratégico global, ya que la competencia estratégica renovada y la propagación de organizaciones extremistas violentas amenazan con socavar la integridad de los estados africanos y los intereses estratégicos clave de EEUU. Al mismo tiempo, estos desafíos presentan, según los expertos estadounidenses, una oportunidad para que Marruecos, el aliado más antiguo de EEUU en el Magreb, tome su lugar como “líder regional” y suministrador de estabilidad con la ayuda del nuevo soporte técnico y de seguridad de “Israel”.
¿Y por qué según los estadounidenses, los chinos, los rusos y los iraníes serían amenazas?
Según el general estadounidense, “China espera fortalecer su posición geoestratégica y su crecimiento económico con la riqueza natural de África”. Con respecto a Rusia, el oficial estadounidense cree que “los rusos apoyan los conflictos civiles y las juntas militares en todo el continente africano”. En cuanto a Irán, “ha venido en ayuda de Rusia, armando a organizaciones extremistas en toda África, desde Somalia hasta el África Occidental”.
La palabra “extremismo”, desde que fue utilizada a su conveniencia por los estadounidenses, ha perdido totalmente su significado y lo cierto es que aquí se menciona como cómplice de un supuesto eje Irán-Rusia-China-Argelia en África opuesto al eje USA-Marruecos-”Israel”.
“Marruecos se ha convertido en la mayor fuente de inversión extranjera directa en África Occidental, superando incluso al creciente capital chino. Al superar a la inversión china, una extensión del poder militar chino, Marruecos está ayudando a derrotar un desafío chino a los intereses de seguridad nacional de EEUU en estas áreas.”
Y concluye: “La administración estadounidense debe ofrecer más oportunidades a los ejércitos “socios” marroquíes e israelíes para entrenar juntos, incluso si eso significa someterse a la necesidad de promover a “Israel” para que participe plenamente en las maniobras “León Africano”, además de integrarlo en otros acuerdos multilaterales y ejercicios regionales, con el fin de mejorar la interoperabilidad entre “Israel”, Marruecos y otros socios regionales”.
Es cuestionable, sin embargo, que el pueblo marroquí acepte el papel de peón del régimen israelí que EEUU pretende otorgarle. El lunes 8 de agosto, apenas 24 horas después de la tregua en Gaza, miles de marroquíes salieron a la calle para gritar “¡Muerte a la entidad sionista, Muerte a la normalización!”. Era la segunda vez tras la manifestación antisionista de hace dos semanas contra la visita del jefe de Estado Mayor del ejército israelí, Aviv Kochavi, a Rabat… Y todo ello, con el telón de fondo de un embajador sionista, el hombre más odiado en Marruecos, que más de un año después de su nombramiento sigue buscando alojamiento sin encontrarlo.
Source: Press TV