Las autoridades israelíes han dado luz verde a la demolición de 58 viviendas palestinas en el barrio de Silwan, en el Jerusalén Este ocupado (Al Quds), para dar paso a la ampliación de un parque en la zona, mientras Tel Aviv continúa con sus actividades de expansión de asentamientos ilegales y sus políticas de apropiación de tierras en los territorios palestinos a pesar de las protestas internacionales.
El Centro de Información Palestino, citando fuentes locales, informó el lunes que un tribunal israelí rechazó una apelación presentada por residentes palestinos contra la demolición de sus casas en el barrio de Wadi Yasul, al suroeste de Silwan, con el pretexto de “construcción sin licencia”.
Además, señaló que la decisión permitirá al municipio israelí arrasar 58 de las 84 casas que están amenazadas de demolición en el vecindario, y agregó que unas 60 personas, incluidos niños y ancianos, serán desplazadas si se lleva a cabo la medida.
Según el funcionario local Jalid Shuweiki, “Israel” busca demoler este vecindario y desplazar a sus residentes para establecer lo que llama “el bosque de la paz” en la zona.
Los residentes de Wadi Yasul han estado tratando de legalizar sus casas desde 2004, pero sin éxito. Unos 1.050 palestinos viven en este barrio.
El barrio de Silwan ha sido durante años el objetivo de las organizaciones de colonos israelíes. Algunas de las familias palestinas en Silwan han estado viviendo allí durante más de 50 años desde que fueron desplazadas de la Ciudad Vieja en la década de 1960. La propiedad palestina en el área es reclamada por extremistas israelíes respaldados por Ateret Cohanim, una fundación de ultraderecha que trabaja para fortalecer la presencia judía en el Jerusalén Este ocupado (Al Quds).
El régimen de Tel Aviv también planea expulsar a las familias palestinas del vecindario de Sheij Yarrah en un intento de reemplazarlas con colonos. Ese plan provocó días de combates entre Hamas, con sede en Gaza, y el régimen israelí en mayo.
Source: Press TV