Por una vez, un periódico israelí dice la verdad: “¿Cuál es el sentido de normalizar las relaciones con Bahrein? Ciertamente este pequeño reino está detrás del telón de la política saudí y allana el camino para la normalización de vínculos de “Israel” con la Arabia del rey Salman, pero, aparte de esto, ¿existe realmente algún interés en que las relaciones Tel Aviv-Manamá, que son incluso más antiguas que las existentes entre “Israel” y los Emiratos, sean conocidas por el público?”, se pregunta Yediot Aharonot.
“Por supuesto que el reino es el hogar de la Quinta Flota de EEUU y está justo enfrente de Irán. ¿Y qué? Dado que los estadounidenses no están haciendo nada allí, ¿qué podría hacer un “Israel” plantado en Bahrein contra Irán militarmente? Es un país de 1,5 millones de habitantes de los cuales el 70% son shiíes. Son personas que tienen lazos de sangre con los iraníes porque la isla formaba parte del territorio iraní antes de ser separado de él en 1970 durante régimen del Shah. El hecho de abrir una embajada allí es tanto más peligroso cuanto que este tejido demográfico de mayoría shií está claramente en contra de “Israel”. El sábado por la noche, los jóvenes shiíes salieron a las calles para denunciar la normalización, por ahora pacíficamente, pero este es un aspecto que puede cambiar con el tiempo.
“De hecho, desde un punto de vista geopolítico, la firma del acuerdo del acuerdo con Bahrein responde al proyecto estadounidense de crear un “Gran Oriente Medio” donde, como ha dicho el Primer Ministro israelí, “Israel” “ya no tendría que ceder los territorios ocupados a cambio de seguridad. El primer ministro también nos prometió una nueva era colocada bajo el signo de “paz por paz”y “economía por economía”. Queremos la paz, pero no en el Golfo Pérsico, sino en Cisjordania, en el frente sur con Gaza o incluso en el frente norte con el Líbano”.
La realidad es que “Israel”, como sus amigos árabes con quienes trabajaba en secreto sin tener que incurrir en la ira de Irán y sus aliados en la región, se dejó explotar por el presidente Trump para sus necesidades electorales. Con este tren de “normalización”, Israel no compra seguridad sino odio, resentimiento y, sobre todo, más peligro.
Desde el anuncio de la normalización con los Emiratos, la Autoridad Autónoma se ha convertido en una mera sombra de sí misma. El futuro de nuestra cooperación en materia de seguridad está rodeado por un halo de incertidumbre. Se está alejando de los países del Golfo y parece que no tendrá más remedio que llegar a un acuerdo con Gaza. Esto significa que unos 300 ataques anti-israelíes en Cisjordania solo en 2019, la mitad de los cuales fueron apuñalamientos, se convertirán en operaciones armadas y, quién sabe, si en el lanzamiento de cohetes y misiles. Sobre todo porque Hamas tiene su sede nuevamente en Beirut, muy cerca de Hezbolá. Este tren de normalización que desencadenó el golpe de Netanyahu-Trump empuja a los palestinos a los brazos de Irán y eso significa exacerbar la presión sobre “Israel”. En agosto, Gaza logró ganar su caso enviando globos incendiarios a nuestros asentamientos durante 19 días. Y nuestros ataques con misiles y bombas no hicieron nada. ¿Qué pasará en un tiempo cuando los palestinos estén totalmente aislados de Riad y de Abu Dhahi y actúen en concierto con Teherán?
En las horas siguientes al anuncio de la normalización de “Israel” / Bahrein, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán (CGRI) emitió una declaración muy significativa: prometió a las autoridades del Reino de Bahrein “respuestas adecuadas a esta traición”. El CGRI aseguró que este acto no quedará sin consecuencias para esta monarquía árabe muy pequeña y que son los “combatientes palestinos los que se vengarán”. Lo mismo ocurre con Hezbolá, que condenó este acuerdo con un tono inusualmente violento, también prometiendo venganza. ¿Cuáles son estas promesas de venganza? Más presiones, amenazas y ataques contra nuestras colonias.
Los recientes compromisos de las monarquías árabes con “Israel” no tendrán ningún impacto en la situación geopolítica, aparte de alinear a los palestinos con Irán y crear células antiisraelíes en las monarquías del Golfo. “Bahrein ha seguido a los Emiratos, sin duda, pero a riesgo de poner en peligro su propia seguridad, que está lejos de los intereses de “Israel.” No se puede descartar una intifada bahreiní y es solo la punta del iceberg. Las fuerzas armadas iraníes acaban de completar una vasta maniobra militar naval de tres días con, por primera vez, una nueva fase de operaciones anfibias y de desembarco.
El comandante en jefe de la Armada iraní sugirió que se trataba de una operación destinada a responder a los países vecinos del sur de Irán: obviamente pensamos en los Emiratos pero también en Bahrein. Si estos dos países, que tendrán que dar la bienvenida a los oficiales israelíes, creen que EEUU los apoyará en caso de una ofensiva iraní, están equivocados. Al igual que “Israel” si cree que será capaz de atacar a Irán desde los Emiratos y Bahrein sin tener que sufrir el ataque de miles de misiles en Tel Aviv, Eilat o Haifa.
Source: Press TV