El Ministerio de Asuntos Exteriores palestino pidió a la comunidad internacional y a las organizaciones internacionales relevantes, especialmente a la Organización Mundial de la Salud, que asuman sus responsabilidades y obliguen a las autoridades de ocupación israelíes a detener sus violaciones y medidas racistas practicadas contra la población palestina en Jerusalén ocupada que están llevando a cabo iniciativas para preservar su seguridad y salud en medio de una negligencia israelí hacia la propagación del coronavirus.
El Ente palestina condenó, en un comunicado emitido, el asalto de las fuerzas de ocupación la localidad de Silwan y el centro médico palestino establecido por el comité de emergencia en la localidad.
De acuerdo con la nota, El Ministerio palestino indicó que las medidas racistas de ocupación se han intensificado desde el comienzo del brote de la epidemia del coronavirus con el objetivo de obstruir las iniciativas de palestinos en la Jerusalén ocupada para enfrentar esta epidemia, en la que el número de casos de infección en la ciudad llegó a 80 contagiados.
Por su parte, el Ministerio de Salud palestino anunció el registro de tres nuevas infecciones con el nuevo coronavirus en las ciudades de Hebrón y Ramalá, elevando el número a 308 casos, incluidos 80 casos en la ciudad ocupada de Jerusalén.
Source: SANA
