El primer ministro de El Líbano, Saad Hariri, pidió el viernes 72 horas a los partidos políticos para resolver la situación crítica del país con dos días consecutivos de airadas protestas masivas.
“Cualquiera sea la solución, no tenemos tiempo o nuestros socios dan una respuesta clara o tendré un enfoque diferente”, indicó en un discurso retransmitido por televisión.
Hariri consideró que la situación crítica actual supera a cualquiera de las pasadas para lo cual, dijo, “he estado tratando de ofrecer soluciones durante tres años”.
Según el jefe del Gobierno algunos pusieron obstáculos en su camino para formar el gabinete y también a sus esfuerzos por reformas, las cuales, explicó, no significan más impuestos, sino cambios en el funcionamiento de la economía, explicó.
Casi al unísono del discurso del primer ministro, las protestas tomaron mayor fuerza con enfrentamientos entre manifestantes y la Policía.
Una multitud airada se fue contra el palacio del Grand Serial (de Gobierno), pero los custodios evitaron su paso.
Este jueves comenzaron las protestas en Beirut y luego se extendieron a Trípoli, Baalbeck, Biblos, Tiro y Sidón.
En un inicio la integraban unas docenas de personas, pero ocurrió una avalancha, con la incorporación de decenas de miles que condenan al Gobierno y exigen su renuncia.
Las manifestaciones repudiaban proyectos de medidas austeras que el ejecutivo debate en el presupuesto de 2020 y una decisión polémica de imponer una tarifa de 0.20 dólares diarios por uso de WhatsApp u otra aplicación de Internet, colmó la copa de la paciencia popular.
Source: PL