A medida que la situación evoluciona en Yemen y se produce un choque entre Arabia Saudí y su aliado, los Emiratos Árabes Unidos, Haaretz cree que todo ello podría fortalecer la posición de Teherán en la región en detrimento de Riad.
En un artículo sobre los últimos acontecimientos en Yemen, el sitio web israelí dice: “La toma de Adén, el derrocamiento de los altos funcionarios (del ex presidente Mansur Hadi) y los violentos enfrentamientos que se han cobrado la vida de unas 40 personas y provocado cientos de heridos, anuncian un desacuerdo que se está convirtiendo en un verdadero conflicto entre Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos.”
Haaretz escribe que los Emiratos Árabes Unidos han decidido cambiar su política, retirar sus fuerzas de Yemen y fortalecer su cooperación con Irán en materia de seguridad marítima en la región del Golfo Pérsico tras los ataques del movimiento yemení Ansarulá contra las instalaciones petroleras del reino saudí.
Además, Dubai, uno de los emiratos de los Emiratos Árabes Unidos, ha enviado una delegación económica a Irán para proporcionar visados a los empresarios iraníes para que inviertan en Dubai, que se encuentra actualmente en crisis. Agregó que, a cambio de todo esto, Ansarulá prometió dejar de atacar objetivos emiratíes.
Según la fuente israelí, la perspectiva de una solución diplomática que allane el camino para las conversaciones en Yemen claramente beneficiará a Irán, principalmente porque Arabia Saudí se verá obligada a abandonar Yemen, mientras que los Emiratos Árabes Unidos dejarán de luchar contra la influencia de Teherán en las zonas controladas por Ansarulá.
“Según los informes, unos 3.000 soldados saudíes han muerto en Yemen y otros 20.000 resultaron heridos. También se cree que la guerra le costó a Riad decenas de miles de millones de dólares o más”, dijo Haaretz.
En otra parte de su artículo, el periódico israelí citó los obstáculos que enfrenta Riad al señalar que el Congreso de EEUU ha tratado de congelar las ventas de armas al reino, aunque el presidente Donald Trump lo ha vetado hasta ahora. El Reino Unido, por su parte, podría suspender sus ventas de armas a Riad, dependiendo del resultado de una demanda en un tribunal británico, que califica estas ventas como una violación de la ley británica. La legislación en cuestión prohíbe la venta de armas si es probable que dañen deliberada o accidentalmente a los civiles.
“Es cierto que retirarse de Yemen sería una confesión de derrota que podría socavar dramáticamente el estatus de Mohammed bin Salman e incitar a sus rivales a tratar de derrocarlo. Pero Arabia Saudí ya tiene una larga lista de fracasos militares y diplomáticos de los que MBS es responsable, incluyendo el fracaso de su política de derrocar al presidente sirio Bashar al Assad; la extraña renuncia del primer ministro libanés Saad Hariri en un viaje a Arabia Saudí, de la que rápidamente se retractó después de regresar al Líbano; la expulsión del poder de su aliado, el presidente Omar al Bashir, en Sudán; y el asesinato del periodista Yamal Khashoggi”, agregó.
Según Haaretz, cualquier debilitamiento del estatus del príncipe heredero de Arabia Saudí daría escalofríos a los dirigentes y responsables de inteligencia israelíes, ya que esto asestaría un golpe directo a la alianza saudo-israelí contra Irán.
Source: Press TV