El ministro de Asuntos Exteriores de España, Josep Borrell, mantuvo encuentros en Washington tanto con el Secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, como con el Consejero de Seguridad Nacional, John Bolton, a los que trasladó el rechazo de Madrid a la posible activación total del Título III de la Ley Helms-Burton.
Según informó la cancillería española en un comunicado donde se ofrecen pormenores de la reunión, Borrell manifestó el rechazo de Madrid a la aplicación de esa ley “por las negativas consecuencias que esta medida tendría para los intereses españoles”.
Además, Borrell añadió que la aplicación traería consecuencias negativas también “para los socios europeos en Cuba” y para “las relaciones bilaterales entre países aliados”.
El Título III de la Ley Helms, aprobada en 1996, permite a ciudadanos estadounidenses y a cubanos naturalizados en EEUU demandar judicialmente a la isla por las propiedades nacionalizadas en la década de 1960.
Dicho apartado permaneció suspendido de manera ininterrumpida desde la entrada en vigor de la ley, por períodos renovables de seis meses, como parte del entendimiento alcanzado entre la Unión Europea y los Estados Unidos en 1998.
Sin embargo, el pasado día 17 de enero, el Gobierno de los Estados Unidos decidió suspender el Título III por apenas 45 días para, el 4 de marzo, renovar dicha suspensión por un período de 30 días, lo que abre la puerta a su aplicación.
En sus reuniones con los mandatarios estadounidenses, Borrell recordó que, al igual que el conjunto de Estados Miembros de la Unión Europea, España rechaza de manera “firme” la “aplicación extraterritorial de leyes nacionales sancionadoras por considerarla contraria al derecho internacional”.
Source: Sputnik