Habiendo ido al Líbano para denunciar lo que considera las “actividades desestabilizadoras” de Hezbolá, el secretario de Estado de los EEUU, Mike Pompeo, ha visto como sus tesis generaban un amplio rechazo por parte de sus interlocutores oficiales libaneses.
El Líbano es la última etapa de la gira de Pompeo en Oriente Medio, centrada en la creación de un frente regional contra Irán, que estaría integrado por el régimen sionista y algunos gobiernos árabes lacayos de EEUU.
El Líbano rechaza a una alianza contra Irán
En relación a esta cuestión, fuentes ministeriales libanesas manifestaron al canal de televisión Al Mayadin que Pompeo iba a oír a sus interlocutores libaneses decir que el Líbano no tiene las capacidades de aceptar las exigencias norteamericanas, en especial en lo que concierne a su implicación en una alianza regional árabe anti-iraní, dado que la política oficial libanesa rechaza unirse a una alianzas de este tipo. Más de un tercio de la población libanesa es además shií y mantiene una actitud pro-Irán.
Hezbolá, una respuesta a la ocupación israelí
Durante su encuentro con el jefe del Parlamento, Nabih Berri, el jefe de la diplomacia estadounidense vio un primer rechazo a sus posturas y declaraciones.
“Él habría insistido en las preocupaciones de EEUU en relación a las “actividades desestabilizadoras” de Hezbolá en el Líbano y la región y los riesgos que suponían para la seguridad, la estabilidad y la prosperidad del Líbano”, dijo su portavoz, Robert Palladino, según AFP.
Sin embargo, la respuesta de Berri fue muy clara: “La resistencia de Hezbolá y la de todos los libaneses es debida a la ocupación israelí de los territorios libaneses, que continúa”, señaló la agencia rusa Sputnik. Él añadió que Hezbolá es un partido político presente en el Parlamento y el gobierno libanés.
Hezbolá está a la cabeza de tres ministerios en el nuevo gobierno libanés. Armado por Irán, él constituye la punta de lanza del Líbano contra las veleidades israelíes hostiles.
Pompeo llegó al Líbano tras una visita de dos días a la Palestina ocupada en el curso de la cual se reunió con el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu. Una visita destinada también a marcar el apoyo de la Administración Trump a Netanyahu, que está sumergido en diversos casos de corrupción.
El Líbano rechaza la Línea Hofe
Delante de su anfitrión estadounidense, informó la televisión libanesa Al Mayadin TV, el jefe del Parlamento libanés también reiteró el rechazo de Beirut de la Línea Hofe, una propuesta estadounidense diseñada para separar la zona de gasuística marítima libanesa de la ocupada por “Israel”. Para el Líbano, esta linea tiene la desventaja de otorgar a “Israel” 160 km2 de los 860km2 que constituye el área marítima libanesa. Según Al Mayadin TV, en la reunión de Pompeo con el primer ministro libanés, Saad Hariri, las posiciones de este último fueron muy similares a las de Berri, especialmente en lo que respecta a la delimitación de las fronteras marítimas.
Rechazo libanés a los intentos occidentales de bloquear el regreso de los refugiados sirios
Pompeo sufrió otra decepción durante su reunión con el presidente de la República, el general Michel Aoun. Este rechazó los intentos del norteamericano de vincular el regreso de los refugiados sirios con un arreglo político en Siria. Este tema es muy importante para el jefe de Estado libanés, que se manifiesta incansablemente contrario a los intentos occidentales de usar dicho tema como un instrumento de presión contra Damasco.
Solo un tema parece haber sido objeto de un acuerdo entre los responsables libaneses y Pompeo. Con Berri, discutió “la necesidad de mantener la calma en la frontera entre el Líbano e “Israel””, según Palladino.
“Israel”, que invadió el Líbano en 1978, fue expulsado de ese país por los combatientes de Hezbolá en 2000. En 2006 sufrió otra derrota en la guerra de 33 días en el Líbano a manos del movimiento libanés, pese a los medios utilizados por los israelíes.
Source: Al Manar
