El presidente libanés, Michel Aoun, aclaró que la Resistencia Islámica o Hezbolá no interfiere en las funciones de las autoridades del país y su compromiso esencial, dijo, es apoyar la estabilidad y la paz.
En una entrevista con la televisión francesa difundida el lunes por el canal panárabe Al Mayadin, Aoun indicó que la participación de Hezbolá en la guerra en Siria ocurrió después de que en ese conflicto se involucraran 84 países.
Según el jefe de Estado, la retirada de los combatientes de la Resistencia Islámica tendrá lugar al término de la contienda bélica en la vecina nación.
Aoun reiteró que Hezbolá no tuvo iniciativa alguna de atacar a Israel y, por el contrario, expresa su compromiso de defender el Líbano contra los proyectos agresivos del régimen de Tel Aviv.
De regreso al tema de Siria, el presidente libanés declaró que reconoce a Bashar al Assad como jefe del Estado y ‘debemos tratar con el Gobierno legal; no hay ninguna otra opción’, apostilló.
‘…las relaciones entre el Líbano y Siria son limitadas en la actualidad, añadió, y siempre y cuando Assad sea el presidente, nosotros lo reconocemos porque no hay ningún otro representante de Siria’.
Respecto al estatus de Jerusalén, Aoun opinó que la decisión de EEUU de ofrecer esa ciudad santa como regalo a los israelíes constituye una violación de las leyes y derecho internacional.
Hay resoluciones sobre Al Quds o Jerusalén emitidas por el Consejo de Seguridad de la ONU, apuntó, por lo tanto, la decisión estadounidense es un desafío a todos, subrayó.
Sobre una aprobación de países árabes para normalizar las relaciones con Israel que incluya una renuncia a Jerusalén, el presidente libanés afirmó que la ciudad santa está dentro de Palestina y nadie tiene derecho a hablar en nombre de los que viven allí; esa es la patria de los palestinos, aseveró.
Source: PL