El domingo 28 de enero tuvieron lugar combates en Adén, en el sur de Yemen, entre mercenarios favorables al presidente dimitido Abed Rabbo Mansur Hadi, pagados por Arabia Saudí, y separatistas del Sur aliados con los Emiratos Árabes Unidos.
Los enfrentamientos prosiguen en diversas zonas de la segunda ciudad yemení. Las milicias separatistas, que están al mando de Aidaus al Zubaidi (el ex gobernador de Adén), tomaron el control de Jomaksar, Al Moala, Al Tawahi y dos campamentos militares a la entrada del distrito de Crater.
También tomaron el campamento militar 20 en la frontera con la provincia de Abyan, dijeron fuentes de información en el acto.
Decenas de mercenarios pro-Haid, incluyendo el comandante de la Brigada Hamdan, han sido capturados. Más de 20 personas han sido muertas y no menos de 120 heridas, la mayor parte de ellos miembros de la milicia pro-Hadi. Varios civiles figuran entre las víctimas.
El lunes, los separatistas del Sur, aliados con los EAU enviaron refuerzos a Adén procedentes de las provincias de Abyan y de Maarib.
El aeropuerto de Adén ha sido cerrado y las rutas terrestres bloqueadas.
Ahmed bin Daguir, primer ministro pro-saudí dimitido ha advertido contra “un golpe de estado de los Emiratos Árabes Unidos en el sur de Yemen, que está ahora bajo el control de Abu Dhabi”. Según las últimas informaciones, Bin Daguir ha hubido del Palacio de al Maashiq, en Adén, hacia un campo de la coalición saudí, después de que varias localidades hayan caído en manos de los EAU y sus mercenarios.
Los separatistas pro-EAU estuvieron anteriormente aliados al gobierno, pero la situación comenzó a deteriorarse en abril de 2017, cuando Hadi destituyó a Al Zubaidi, que formó, a su vez, al mes siguiente el “Consejo de Transición del Sur”, una autoridad paralela dominada por los secesionistas. Al mismo tiempo, los EAU crearon y entrenaron una fuerza llamada “Cintunrón de Seguridad”, que apoya al Consejo.
El Consejo dio a Hadi un ultimátum la pasada semana exigiendo la destitución del primer ministro Ahmed bin Daguir y cambios en el “gobierno”, acusado de “corrupción”.
Fuentes políticas del Sur afirmaron que “el combate real no ha comenzado aún y que lo que pasó el domingo en Adén es una pequeña muestra de lo que va a estallar entre las milicias apoyadas por diferentes polos de la coalición.
Según la agencia Saba, el gobierno de Hadi ha manifestado que “el campo huthi (Ansarulá) es el primer beneficiario del actual conflicto”.
Source: Divrersas