En el mundo, hay un cambio significativo en relación con el dólar. Las expectativas de crecimiento económico obligaron a los inversores a recurrir al yuan, el euro, el yen y las monedas de los mercados emergentes, dejando al dólar en quiebra, escribe The Wall Street Journal.
De acuerdo con las tendencias recientes en la economía global, el dólar está perdiendo su atractivo a medida que se presentan alternativas más realistas a los inversores, dice el Wall Street Journal.
Además, según algunos analistas, las predicciones sobre el futuro del dólar no son tranquilizadoras. Esto se debe a la reforma fiscal de Donald Trump, que puede aumentar el déficit presupuestario de EEUU, lo que también presionaría al dólar en 2018. En este contexto, la moneda estadounidense podría perder un poco más su valor.
Varios analistas señalan que el debilitamiento del dólar tendrá consecuencias positivas para los exportadores estadounidenses. Además, tal dinámica justificará un aumento más significativo en los tipos de la Reserva Federal.
Sin embargo, la caída del dólar podría empujar a los inversores hacia otras monedas, como el euro y el yuan, a las que ven como refugios más seguros frente a un dólar inestable.
Source: The Wall Street Journal