El Ministerio de Salud sirio informó el miércoles que el número de muertos por los enfrentamientos en la ciudad de Ashrafieh Sahnaya, en la zona rural de Damasco, ascendió a 11, incluyendo miembros de la Seguridad General, además de varios heridos. Esto ocurre a pesar de una reunión celebrada ayer entre las autoridades y líderes drusos para contener la tensión.
Una fuente de seguridad en Damasco declaró a SANA que “grupos al margen de la ley de la zona de Ashrafieh Sahnaya atacaron un puesto de control de la Dirección General de Seguridad ayer por la noche, resultando en tres miembros con heridas de diversa consideración”.
La fuente añadió: “Al mismo tiempo, otros grupos se desplegaron en terrenos agrícolas y abrieron fuego contra vehículos civiles y otros del Departamento de Seguridad Pública en las carreteras, matando a seis personas e hiriendo a otras”.
El Ministerio del Interior enfatizó que “no dudará en hacer frente a estos criminales y atacará con mano dura a cualquiera que intente desestabilizar la seguridad de Siria y atacar a su población”. Mientras tanto, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó de enfrentamientos entre hombres armados vinculados al gobierno y otros miembros de la comunidad drusa en la zona. El Observatorio señaló que los enfrentamientos se concentraron en el complejo de viviendas Ashrafieh Sahnaya y se extendieron a las inmediaciones del Banco Árabe y la entrada de la ciudad, con controles de seguridad atacados y fuertes disparos de represalia por ambas partes.
Las autoridades sirias han declarado un toque de queda en la ciudad de Sahnaya hasta las 17:00 h para intentar controlar la inestable situación de seguridad. El periodista y activista de la sociedad civil Rawad Ballan declaró a Al-Mayadeen: “Todas las regiones sirias están preocupadas y temerosas de lo que pueda ocurrir sobre el terreno”.
En un acontecimiento notable, varios miembros drusos de los Altos del Golán sirios ocupados irrumpieron en la franja fronteriza que los separa del territorio sirio, expresando su solidaridad con los drusos de Ashrafieh Sahnaya tras los sangrientos enfrentamientos en la zona rural de Damasco.
El Consejo Militar de Suweida condena los sucesos de Sahnaya y advierte sobre conflictos sectarios
En medio de la escalada de tensiones en la zona rural de Damasco, el Consejo Militar de Suweida emitió un comunicado condenando enérgicamente lo que describió como una “escalada terrorista” contra las ciudades de Sahnaya y Ashrafieh. Responsabilizó directamente a las “autoridades de facto a las que nos oponemos” de cada gota de sangre drusa derramada y del continuo sufrimiento de civiles inocentes como consecuencia de estos ataques.
La declaración añadió: “La complicidad y el silencio de estas partes constituyen una clara asociación para la incitación y la comisión de crímenes contra nosotros, en particular los drusos, y amenazan la unidad del tejido nacional sirio en su conjunto”.
El Consejo Militar afirmó su apoyo inquebrantable a la población de Jaramana, Sahnaya y Achrafieh, así como a todas las zonas afectadas por el terrorismo, enfatizando que “defender a nuestro pueblo y la dignidad de nuestra nación es un deber inquebrantable”.
La declaración instó a todas las partes, incluidas las oficiales, a asumir sus responsabilidades nacionales y morales en la lucha contra el terrorismo y a tomar medidas urgentes para garantizar la seguridad de los ciudadanos y la estabilidad del país.
Grupo “Brigada de Montaña” en Suweida: La administración de Damasco tiene interés en los conflictos sectarios
Por su parte, la facción Liwaa al-Yabal en Suweida emitió otro comunicado, enfatizando que “la administración de Damasco está empleando múltiples medidas y tiene interés en allanar el camino para los conflictos sectarios”. Advirtió que “su incapacidad para detener los ataques de takfiris y terroristas leales a ella en Ashrafieh Sahnaya la responsabilizará plenamente de todo lo que suceda después”, y añadió: “Quien advierte, queda disculpado”.
Estos acontecimientos se producen un día después de los enfrentamientos en la ciudad de Jaramana entre hombres armados locales y fuerzas respaldadas por el gobierno. Los enfrentamientos se saldaron con muertos y heridos en ambos bandos, reavivando las tensiones y generando temores a una escalada de la violencia sectaria.
Source: Al Mayadeen