Mientras padres libaneses se apresuraban a evacuar a sus hijos de las escuelas cercanas al edificio residencial atacado por los aviones de guerra sionistas, algunos periodistas y usuarios de redes sociales “libaneses” celebraban las amenazas y ataques israelíes.
“Te extrañamos, Avichay”, decía un tuit en referencia a la alerta de amenaza emitida por el portavoz del Ejército Sionista, Avichay Adraee, tras una parada de cuatro meses.
“Jessy” instó al enemigo israelí a asesinar a todos los residentes de Dahiyeh, y Georges Fakhri instó a la aniquilación total de Dahiyeh tras recibir a Avichay Adraee.
Otros usuarios expresaron su entusiasmo por la escalada israelí, afirmando: “¡Los residentes de Dahiyeh se lo merecen!”.
El periodista armenio-libanés Albert Kostanian justificó el ataque israelí y culpó a Hezbolá, aunque no esté detrás del lanzamiento de misiles matutino al norte de la Palestina ocupada.
Este es un simple ejemplo del escandaloso “patriotismo” que se refleja en las redes sociales. En este contexto, cabe plantear varias preguntas sobre el papel de las fuerzas del orden en la lucha contra este fenómeno anómalo.
El viernes, aviones de guerra israelíes atacaron un edificio residencial en la zona de Yamus-Hadath, en el suburbio del sur de Beirut. Este es el primer ataque de este tipo en la región desde el cese de la agresión a gran escala de “Israel” contra el Líbano el 27 de noviembre de 2024.
Source: Al Manar