Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, más de 500 civiles alauíes han sido asesinados por las fuerzas de seguridad y grupos de milicias aliados en los últimos dos días. Entre las víctimas había mujeres y niños.
“La abrumadora mayoría de las víctimas murieron en ejecuciones sumarias llevadas a cabo por elementos afiliados al Ministerio de Defensa y Seguridad Interior”, afirmó el OSDH, que calificó las masacres como “la venganza colectiva más significativa”.
La ONG, con sede en el Reino Unido, ha acusado a las fuerzas de seguridad y a elementos del Ministerio de Defensa y fuerzas aliadas de crímenes de guerra y violaciones de los derechos humanos.
El Observatorio Sirio confirmó la muerte de 532 civiles alauíes en las zonas costeras de Siria y en las montañas de Latakia, presuntamente a manos de las fuerzas de seguridad y grupos afiliados. Se dice que las muertes fueron parte de ejecuciones selectivas sectarias y regionales, acompañadas de “ejecuciones sobre el terreno” y saqueos generalizados de viviendas y propiedades.
El número total de muertos por la violencia en curso ha llegado ahora a 745, incluidos 213 combatientes de ambos bandos. El Observatorio informó de 93 bajas entre las fuerzas militares leales a las nuevas autoridades y 120 entre los combatientes de la oposición.
Entre las víctimas se encuentran médicos, tanto hombres como mujeres, así como farmacéuticos.
El OSDH y activistas publicaron vídeos que muestran decenas de cadáveres vestidos de civil apilados en el patio de una casa mientras las mujeres lloraban cerca.
صرخاتهم وبكائهم ستلاحقكم إلى اليوم الآخر، هل انعدمت الإنسانية؟ ألا يوجد أي ضمير حي ليضع حد لهذه الفظائع ضد الأبرياء والعزل من #العلويين.
Their screams and cries will haunt you until the end of time. Has humanity vanished? Is there no conscience left to put an end to these… pic.twitter.com/ZW0t6u2Zsu
— Syrian Democratic Ob. | المرصد الديموقراطي السوري (@CoastSyrian25) March 8, 2025
En otro vídeo, aparecen hombres con uniforme militar ordenando a tres personas que se arrastren una detrás de otra antes de dispararles a quemarropa.
Una tercera secuencia muestra a un hombre armado disparando varias veces a quemarropa a un joven vestido de civil en la entrada de un edificio, matándolo a tiros.
En las redes sociales han circulado imágenes de barriles con explosivos arrojados sobre residentes de la costa desde helicópteros de las fuerzas armadas del poder gobernante.
En la gobernación de Hama, un clérigo, Sheij Sha’ban Mansur, y su hijo fueron asesinados tras ser arrestados en la aldea de Salhab. El Consejo Supremo Islámico de la comunidad alauí aseguró que este clérigo de más de 90 años no podía hablar y se movía con dificultad.
Las regiones alauíes en la mira
Desde la caída de Assad, las nuevas autoridades sirias han lanzado operaciones destinadas a erradicar los “restos del régimen”, apuntando especialmente a las regiones alauíes del oeste y el centro del país.
Los residentes y las organizaciones denuncian periódicamente abusos –confiscación de viviendas, ejecuciones sumarias o secuestros– que las autoridades califican de “incidentes aislados”, prometiendo perseguir a los autores pero permitiéndoles hacerlo con impunidad.
El jueves, las tensiones aumentaron en Beit Aana, una aldea en la región de Yableh, cuando los residentes impidieron el arresto de una persona sospechosa de tráfico de armas, según el OSDH.
Las fuerzas de seguridad lanzaron entonces una operación, marcada por enfrentamientos con individuos armados cuya identidad sigue siendo desconocida.
Según SANA, “hombres armados dispararon contra miembros y vehículos del Ministerio de Defensa cerca del pueblo, matando a uno (del lado de las fuerzas de seguridad, nota del editor) e hiriendo a varios”.
Las autoridades luego dispararon desde helicópteros contra hombres armados en la aldea de Beit Aana y los bosques circundantes, y dispararon artillería contra una aldea cercana, según el OSDH. Los líderes religiosos alauíes denunciaron los allanamientos a viviendas civiles y llamaron a “protestas pacíficas” el viernes.
El OSDH registró 213 muertes entre los hombres armados, incluidos 93 miembros de los dos ministerios de Defensa y del Interior y 120 de grupos armados.
El viernes por la noche, el presidente sirio, Ahmad al-Shara (Yulani), llamó a “los insurgentes alauíes a deponer las armas antes de que sea demasiado tarde”. “Seguiremos trabajando por el monopolio de las armas en manos del Estado”, añadió en un discurso.
Limpieza étnica comunitaria
Este sábado, la ODSH informó de un “retorno a la calma relativa” en la región después de 48 horas de enfrentamientos, al tiempo que precisó que las fuerzas de seguridad continuaban su “peinado en las zonas donde están atrincherados los hombres armados”, con el envío de refuerzos.
Los habitantes de la ciudad de Banias lanzaron una llamada de socorro acusando a las milicias del Partido Islámico de Turkestán (wahabí radical) de lanzar “una operación de limpieza étnica de las comunidades” desde la mañana del sábado. Pidieron a las fuerzas de seguridad que intervinieran para detenerlo.
Según los medios de comunicación libaneses, cientos de sirios se han refugiado en el norte del Líbano, especialmente en la región de Akkar y Yabal Mohsen.
Source: Diversas