El primer ministro de Iraq, Muhammad Shiaa al-Sudani, renovó este jueves su llamamiento a la retirada del país de la coalición internacional.
Durante su participación en el Foro Económico Mundial en Davos, el jefe del gobierno consideró que el final de la misión de estas fuerzas extranjeras es crucial para la seguridad y estabilidad en la nación.
Reseñado aquí por medios locales, la postura del líder del Ejecutivo iraquí enfatizó en la necesidad de comenzar de inmediato un diálogo para llegar a un acuerdo sobre un calendario con el propósito de poner fin a la misión de los asesores internacionales.
En este sentido, aseguró que la salida de la coalición extranjera es necesario para la seguridad y estabilidad de Iraq, así como para mantener las relaciones bilaterales entre el país y los miembros de la alianza militar.
También, Al-Sudani destacó que la planificación de la retirada de las fuerzas internacionales fue el eje central de la visita de una delegación liderada por el ministro de Defensa iraquí a Washington en agosto pasado.
En esa ocasión, las conversaciones llevaron a la formación de un comité bilateral para estudiar la retirada de los asesores internacionales, pero las reuniones se detuvieron después de los eventos del 7 de octubre.
A inicios de año, un ataque aéreo estadounidense en la capital resultó en la muerte de dos personas, incluido el subcomandante de las Operaciones del Cinturón de Bagdad en las Fuerzas de Movilización Popular, Muqtada Talib al-Saadi.
En su condena a la agresión, Al-Sudani puntualizó que los repetidos ataques a la sede de las Fuerzas de Movilización Popular por parte de la coalición constituyen los incidentes más peligrosos de los últimos tiempos.
Al mismo tiempo, indicó que la Movilización Popular es una institución oficial afiliada al Estado y está sujeto a él, como parte integral de las Fuerzas Armadas.
Igualmente, el primer ministro describió la presencia de las fuerzas internacionales como desestabilizadora en la nación en medio de la guerra israelí contra la Franja de Gaza.
La acción estadounidense al centro de la Movilización Popular en Bagdad ocurrió en medio de la intensificación de los ataques de la Resistencia de Iraq contra las bases militares norteamericanas en el país y en Siria, en apoyo del pueblo palestino y en rechazo a la complicidad de Washington con el genocidio israelí.
Source: Prensa Latina