El Ejército yemení y los Comités Populares, que han avanzado durante dos semanas hacia la ciudad de Maarib, capital de la provincia del mismo nombre, han logrado romper la segunda línea defensiva de las fuerzas de la coalición saudí y el presidente dimitido Mansur Hadi.
Después de que el Ejército y los Comités Populares de Ansarulá se apoderaran de la línea defensiva de las fuerzas leales al presidente renunciante Mansur Hadi, este último había establecido una segunda línea defensiva este-oeste para defender sus posiciones en la ciudad.
Pero esta línea defensiva fue rápidamente rota por el Ejército y los Comités Populares, como sucedió con la primera hace dos semanas. Las fuerzas leales al presidente renunciante Mansur Hadi establecieron estas dos líneas defensivas con el apoyo directo de sus aliados saudíes y emiratíes.
Decepcionados por ver su segunda línea de defensa destrozada por el Ejército y los Comités Populares de Ansarulá, las fuerzas afiliadas a la coalición agresiva inmediatamente comenzaron a construir una tercera línea de defensa, excavando profundas zanjas.
El hecho de que las fuerzas leales al presidente renunciante Mansur Hadi y los mercenarios de la coalición de agresión saudí-emiratí procedan apresuradamente a la construcción de una tercera línea defensiva en Maarib indica, según los expertos, que los combates están comenzando a acercarse a la ciudad. debido al avance del Ejército y los Comités Populares de Ansarulá, que se encontrarían ahora a dos kilómetros de la misma. Estos últimos han instalado su equipo militar a las puertas de la ciudad y han atacado en dos ejes a los milicianos de Al Islah (Hermandad Musulmana) y Al Qaida.
Según fuentes tribales de Maarib, decenas de guerreros pro-Hadi murieron en una emboscada del Ejército y los Comités Populares que también destruyeron cinco vehículos mercenarios.
En los últimos días, las fuerzas pro-Hadi han sufrido grandes pérdidas de vidas en Maarib y varios de sus altos comandantes superiores han perdido la vida. Algunos observadores creen que las tensiones internas entre Al Islah y los grupos respaldados por los Emiratos Árabes Unidos están detrás de las muertes de estos comandantes militares.
Source: Al Akhbar