La última elección presidencial estadounidense lo demostró una vez más: algo no está bien entre “Israel” y los judíos de EEUU.
Estos últimos votaron por una amplia mayoría a favor del candidato demócrata Joe Biden, mientras que varios de sus líderes pro-israelíes los habían instado a votar a favor del presidente saliente Donald Trump. El presidente de la Coalición Judía Republicana, Norm Colman, gastó millones de dólares en los estados de Florida, Ohio y Pensilvania en lograr esto.
Trump sabía que no tenía suerte con los judíos dadas las predicciones electorales antes de la fatídica fecha. Solo obtuvo el 25% de sus votos en 2016.
Durante su mandato, se esforzó por dar la mayor cantidad de regalos a la entidad sionista.
Parece, pues, que esta comunidad, de 6 millones de integrantes, se aleja cada vez más de las políticas del Likud y su líder, el primer ministro Benyamin Netanyahu.
Cada vez más judíos estadounidenses consideran que es demasiado despectivo hacia los derechos de los palestinos el continuar la ocupación durante 70 años, según la Fundación Ruderman.
Una encuesta de opinión pública que se realizó en esta comunidad también revela que más judíos que nunca están perdiendo interés en “Israel”. Solo del 4 al 5% están interesados en él.
Una tendencia al revés de la línea seguida durante su campaña electoral por Trump, quien incrementó el apoyo de su país a la entidad sionista.
Durante su campaña., Trump nunca perdió la oportunidad de recordar todo lo que había hecho por “Israel” durante sus 4 años en la Casa Blanca, a saber, entre otros, su “acuerdo del siglo”, el reconocimiento de la totalidad de Jerusalén (Al Quds) como capital de “Israel” ignorando los acuerdos internacionales que otorgan la soberanía sobre Jerusalén Este al Estado palestino, el reconocimiento de la anexión del Golán sirio ocupado desde 1967, también en detrimento del derecho internacional, la cancelación de la ayuda estadounidense que se concedió a la Autoridad Palestina … Y también se jactó de haber retirado a su país en 2018 del acuerdo nuclear 5+1 concluido con Irán en 2015.
Y la guinda del pastel: “Estamos en Oriente Medio por “Israel”, dijo.
Sin embargo, la mayoría de los judíos estadounidenses parecen tener una visión diferente de lo que está sucediendo en Oriente Medio.
Un estudio publicado por el Jerusalem Center, titulado “Los judíos estadounidenses en una fase de transición: cómo pueden cambiar las posiciones hacia “Israel”, encontró que una cuarta parte de los judíos estadounidenses creen “que “Israel” es racista y colonialista y que su sistema político se asemeja al del apartheid”. El 31% de ellos dijo que quería votar a favor de los dos diputados demócratas musulmanes Ilhan Omar y Rachida Tlayeb a pesar de que son acusados de “antisemitismo” por grupos de presión pro-Israel. Según el 51% de los judíos estadounidenses, el antisemitismo es más fuerte entre los grupos de la derecha nacionalista blanca.
Las palabras del rabino Ayelet Cohen del New Israel Fund refleja perfectamente este estado de ánimo: “Los judíos estadounidenses ya no tienen interés en “Israel”. Están cansados de luchar por él. Los rabinos están expulsando cada vez más a “Israel” de los programas de estudios de hebreo. Y nadie lo ve”, dijo.
Según los observadores, Trump utilizó su última carta, eligiendo sabiamente las últimas semanas de la campaña electoral para anunciar la normalización de las relaciones entre “Israel” con tres países árabes, Emiratos Árabes Unidos, Bahrein y Sudán, con el fin de intentar influir en el electorado judío. Pero esto no tuvo efecto. Al contrario, fueron más del 70% los judíos que se negaron a darle su voto y optaron por apoyar a su rival, Joe Biden.
Source: Diversas