Ali al Husseini, comandante de las Fuerzas de Movilización Popular (Hashid al Shaabi), dijo que la seguridad regional ha mejorado considerablemente en los meses posteriores a la evacuación de la base estadounidense K1 en Kirkuk.
En una entrevista con el sitio web de Almaalomah, Al Husseini dijo que no se habían producido incidentes relacionados con la seguridad en Kirkuk y sus alrededores en los últimos meses. El número de incidentes de seguridad es casi nulo a diferencia del período en que las fuerzas estadounidenses estuvieron presentes allí, dijo antes de agregar que desde esta retirada las actividades de los grupos terroristas habían disminuido en la región.
Al Husseini también dijo que las fuerzas de seguridad y el Hashid al Shaabi han reestablecido completamente la seguridad en los últimos meses y han logrado atrapar a varios líderes del Daesh.
El 29 de marzo de 2020, el ejército estadounidense anunció que la base militar K1 en Kirkuk había sido entregada a las fuerzas iraquíes. Dos días antes, dicha base fue atacada por un cohete disparado por personas no identificadas. El ataque resultó en la muerte de un soldado estadounidense, mientras que otros tres resultaron heridos.
A pesar de la falta de pruebas, el gobierno estadounidense culpó a Kataib Hezbolá (Resistencia iraquí) de esto. Unos días después, la sede de Kataib Hezbolá en el área de Al Qaim, al oeste de la provincia de Al Anbar, fue bombardeada por fuerzas de la coalición internacional liderada por EEUU.
El ataque estadounidense a la sede de Kataib Hezbolá enfureció al pueblo iraquí y provocó un ataque a la embajada estadounidense.
Source: Press TV
