La coalición liderada por Arabia Saudí, que había declarado lo que llamó un “alto el fuego” en su devastadora guerra contra Yemen hace unas horas, atacó varias posiciones yemeníes poco después del anuncio.
El miércoles por la noche, la coalición afirmó que iba a detener las operaciones militares en Yemen en apoyo de los esfuerzos de la ONU para poner fin a su guerra de cinco años, que mató a decenas de miles y propagó el hambre y las enfermedades.
El portavoz de la coalición, coronel Turki al Maliki, afirmó que la medida se decidió en parte para evitar un posible brote del nuevo coronavirus en Yemen, donde hasta ahora no se han reportado casos.
El portavoz dijo que el alto el fuego entraría en vigencia a mediodía del jueves durante dos semanas y que estaba abierto a la extensión.
Sin embargo, poco después del anuncio, los aviones de combate de la coalición tomaron posiciones en varias regiones yemeníes, incluidas Sa’ada, Amran y Al Bayda, según la televisión Al Masirah de Yemen.
Antes de los ataques aéreos, el movimiento huzí Ansarulá de Yemen había minimizado el anuncio de alto el fuego de Arabia Saudí, describiéndolo como una oportunidad para que Riad salga del atolladero con una mínima vergüenza.
Mohammed al Bujaiti, un miembro de alto rango del Buró Político del movimiento Ansarulá, dijo a al Mayadin TV que la medida de la coalición de anunciar un alto el fuego era solo otra táctica de los agresores.
“Los saudíes han declarado en repetidas ocasiones el alto el fuego en Yemen, pero lo han violado cada vez”, señaló.
Bujaiti dijo que Riad está utilizando el brote de COVID-19 como una oportunidad para el alto el fuego y una salida de la guerra de Yemen con el fin de salvar la cara.
Sin embargo, agregó, si persiste el bloqueo de Yemen, la guerra no terminará.
“Si un alto el fuego no incluye la eliminación del asedio a Yemen, eso sería la continuación de la guerra por parte de Arabia Saudí”, señaló.
Source: Al Masirah (traducido por el sitio de Al Manar en español)