El presidente de EEUU, Donald Trump, ignoró los informes de las agencias de inteligencia estadounidenses en enero y febrero que advirtieron sobre los peligros que planteaba el brote de coronavirus en China, según un informe.
Trump y los miembros del Congreso subestimaron la amenaza del coronavirus y no tomaron medidas que podrían haber frenado la propagación del patógeno, informó el viernes The Washington Post, citando a funcionarios de inteligencia de EEUU.
El virus afecta ahora a más de 20.000 estadounidenses y ha causado hasta el momento 258 muertes en el país.
Los informes de inteligencia no predijeron cuándo el virus podría llegar a EEUU ni recomendaron métodos específicos que los funcionarios de salud pública deberían tomar, pero sí rastrearon la propagación del virus en China y otros países, informó el periódico.
Los informes advirtieron de la necesidad de medidas rápidas por parte del gobierno de EEUU para contenerlo, pero Trump continuó minimizando pública y privadamente la amenaza que el virus representaba para los estadounidenses, dijo el Post.
Trump ha desconfiado de la comunidad de inteligencia de EEUU, describiéndola como parte de un “estado profundo” de burócratas establecidos que buscan socavar sus políticas.
“Puede que Donald Trump no estuviera esperando esto, pero muchas otras personas en el gobierno sí lo estaban, pero simplemente no pudieron lograr que él hiciera algo al respecto”, dijo un funcionario estadounidense al periódico.
Las advertencias de las agencias de inteligencia de EEUU aumentaron a finales de enero y principios de febrero y los asesores de Trump lucharon para que él se tomara el virus en serio, dijeron varios funcionarios con conocimiento del tema.
A principios de febrero, altos funcionarios de EEUU, incluido el asesor adjunto de seguridad nacional de Trump, Matthew Pottinger, comenzaron a pedir una respuesta más efectiva, pero Trump se resistió y continuó asegurando a los estadounidenses que el coronavirus nunca correría desenfrenado en EEUU como lo había hecho en otros países, según informaron personas informadas sobre las reuniones de la Casa Blanca.
“Creo que todo saldrá bien”, dijo Trump el 19 de febrero. “Creo que cuando lleguemos a abril, en un clima más cálido, eso tendrá un efecto muy negativo sobre ese tipo de virus”.
Pero a principios de ese mes, un alto funcionario del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU entregó un mensaje drásticamente diferente al Comité de Inteligencia del Senado, advirtiendo que el virus representaba una “amenaza grave”.
Trump eventualmente alteró sus comentarios luego de que se le mostraran modelos estadísticos sobre la propagación del virus en países asiáticos y europeos y escuchó a líderes empresariales la semana pasada sacudidos por una caída del mercado de valores, según el informe. Pero para entonces los signos indicaban un brote importante en EEUU.
Alrededor del 60 por ciento de los estadounidenses ahora están “muy” o “algo preocupados” por la posibilidad de que ellos mismos o un miembro de su familia queden expuestos al coronavirus, en comparación con el 36 por ciento en febrero, mientras que la confianza en la capacidad del gobierno para responder a la crisis ha disminuido drásticamente, según una encuesta de Gallup publicada el lunes.
Los expertos en salud de EEUU han reprendido severamente a la administración Trump por minimizar inicialmente la crisis.
Source: Medios estadounidenses