El lunes por la mañana se dispararon dos misiles contra una base estadounidense en la ciudad de Majmur, en la provincia de Nínive, al norte de Bagdad, según una fuente de seguridad iraquí.
Según el sitio web iraquí Al Masala News, que cita una fuente iraquí, columnas de humo se elevaron sobre la base durante horas. Inmediatamente después del ataque, que aún no ha sido reivindicado, aviones estadounidenses comenzaron a sobrevolar la base. No se ha publicado ningún informe oficial sobre daños o pérdidas de vidas humanas.
Un líder de la formación kurda Unión Patriótica confirmó este ataque mientras trataba de minimizarlo: “Hay pocos soldados estadounidenses estacionados en Majmur y no tienen una misión de combate”, dijo Rechad Kalaki. Sin embargo, la base en cuestión se encuentra en una provincia iraquí de mayoría kurda donde las tropas estadounidenses disfrutaban hasta ahora de una seguridad total.
Los recientes ataques contra bases militares pertenecientes a las Fuerzas de Movilización Popular, el Hashid al Shaabi, han sido denunciados por el comandante en jefe de este último, el comandante Mahdi Abu Mohandes, como el trabajo de los norteamericanos: “Incluso si Israel está de una forma u otra detrás de estos ataques, solo puede actuar dentro del marco de la coalición estadounidense”.
En EEUU se alzan voces para advertir contra el impacto negativo que estos ataques podrían tener para los intereses de los norteamericanos. El sitio estadounidense Critical Threats se refiere en uno de sus artículos recientes a la reciente visita del portavoz del movimiento de Al Nuyaba, uno de los principales componentes del Hachd al Shaabi, a Teherán y sus reuniones con las máximas autoridades de Irán: “El hecho de que un dron de reconocimiento de origen desconocido fuera derribado sobre la base de la 12ª División del Hashid no debe tomarse a la ligera. Esta base pertenece al movimiento de Al Nuyaba, cuyos comandantes mantienen estrechos vínculos con Teherán. El portavoz del movimiento, Nasr al Shemmari, se reunió en Teherán con uno de los más altos comandantes del CGRI, el mayor general Rahim Safavi, quien le dijo: “La seguridad y protección de Bagdad equivale para nosotros a proteger Teherán”.”
Source: Medios iraquíes