Un artículo en el periódico estadounidense New York Times, que informa sobre la divergencia de opiniones del Pentágono con el Departamento de Estado sobre las sanciones de EEUU contra el grupo de resistencia iraquí Al Nuyaba, ha provocado muchos comentarios en la prensa regional e internacional.
Según el artículo del New York Times, los esfuerzos de EEUU para aislar a Irán, incluyendo las sanciones contra los grupos de resistencia y las figuras políticas iraquíes cercanas a la República Islámica de Irán, no solo han causado tensiones. entre Washington y Bagdad, sino también tensiones y controversias dentro de la administración Trump.
El secretario de Estado Mike Pompeo dijo que Washington había agregado a pesar de la oposición de las autoridades iraquíes a Al Nuyaba y su secretario general a su lista particular de “grupos terroristas”, informó el New York Times.
El Departamento del Tesoro de EEUU anunció el martes, 5 de marzo, sanciones contra el Movimiento Al Nuyaba y su secretario general, Akram al Kaabi.
En este contexto, EEUU ha estado tratando de persuadir al gobierno de Bagdad de que deje de apoyar a los grupos de resistencia iraquíes, lo que podría provocar la ira de las autoridades y el pueblo iraquíes y poner en peligro los intereses y el ejército estadounidense en ese país, señala el New York Times.
El secretario de Estado de EEUU anunció el lunes (8 de abril) que el nombre del Cuerpo de Guardias Revolucionarios Islámicos (CGRI), uno de los componentes de las Fuerzas Armadas iraníes, había sido incluido en su lista negra de organizaciones terroristas.
Esta es la primera vez que EEUU se permite situar en su lista negra a un cuerpo de las fuerzas armadas de un estado.
Cabe señalar que el CGRI ha jugado un papel importante en el nacimiento y desarrollo de Al Nuyaba y otras organizaciones de la Resistencia iraquí.
Hay desplegados unos 5.000 soldados estadounidenses en diferentes bases de Iraq. Ellos podrían convertirse en objetivos potenciales de ataques de la resistencia iraquí, que cuenta con decenas de miles de experimentados combatientes.
“Incluso si Irán se abstiene de disparar contra las tropas estadounidenses, los políticos iraquíes próximos a Teherán podrían adoptar en el Parlamento iraquí una ley que obligue a la retirada de los militares estadounidenses del país. Esto sería una verdadera pérdida”, indicó el Wahington Post. El diario añadió que Irán fortalecerá sus relaciones con Iraq y sus organizaciones de resistencia para impedir a los estadounidenses implantarse en Siria, Líbano o Yemen.
Source: Medios estadounidenses