La Cuarta Cumbre África-Mundo Árabe, celebrada el martes en la capital de Guinea Ecuatorial, Malabo, estuvo dominada por las discrepancias entre las dos partes debido a una disputa por el tema del Sáhara Occidental.
Aunque dos tercios de los países árabes participaron en la cumbre, Marruecos, cuatro países del Golfo -Arabia Saudí, Qatar, EAU y Bahrain- además de Jordania, Somalia y el régimen de Hadi en Yemen se retiraron de la cumbre debido a la presencia de los símbolos de la RASD (República Árabe Saharaui Democrática) en la sala.
El Gobierno marroquí dijo en un comunicado que la participación tenía que limitarse a los países miembros de Naciones Unidas, un principio que, según la misma fuente, fue respetado en las anteriores cumbres.
La retirada de la cumbre organizada por Guinea Ecuatorial se debe a la presencia del “emblema de una entidad fantoche en las salas de reuniones”, como suele referirse a la RASD Marruecos, que tiene por costumbre contestar su presencia en cualquier foro internacional.
Sin embargo, la Unión Africana, coorganizadora del foro, tiene entre sus miembros a la RASD y su presidenta, Nkosazana Dlamini Zuma, dijo que “continuaremos apoyando a los pueblos palestino y saharaui para que recobren sus derechos nacionales”.
Pese a que en el comunicado marroquí se proclama el interés de Marruecos y de sus aliados árabes por garantizar “el éxito” de la cumbre, lo cierto es que su retirada supone prácticamente llevar ese foro al fracaso.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de la RASD, Mohamed Salem Uld Salek, afirmó que “la firme posición africana expresada por los países del continente durante la Cumbre Árabe – Africana ha confirmado que la Unión Africana rechaza el chantaje y arrogancia marroquí y que el reconocimiento africano a la RASD es una realidad tangible”.
Él añadió que “la Unión Africana por unanimidad de todos sus miembros manifestó su adhesión a los principios y objetivos de la Unión, expresando su firme compromiso y solidaridad con la RASD”.
Los refugiados saharauis residentes en los campos de Tinduf (Argelia) han venido exigiendo un referéndum de autodeterminación para el territorio del Sáhara Occidental, anexionado por Marruecos en 1975, pero Rabat rechaza esta perspectiva y considera el territorio como parte integrante de su nación. Un proceso de paz de la ONU sobre el Sáhara Occidental terminó en fracaso.
Source: Agencias