Aunque aplazó un despliegue general, el Ejército libanés persiste en garantizar con su presencia estabilidad y seguridad en el campamento palestino de Mieh Mieh, en la sureña ciudad de Sidón, según despachos remitidos el miércoles.
La participación de los militares se debe a las tensiones causadas por enfrentamientos entre los movimientos Al Fatah y Ansarolá, que llegaron a su clímax a mediados de mes con un tiroteo que incluyó hasta disparos de mortero.
Durante esa refriega, murieron dos integrantes de Al Fatah y recibieron heridas una veintena de personas, aparte de que el terror se apoderó de vecinos que huyeron a la desbandada.
Los informes llegados desde la instalación de refugiados, dan cuenta que el mando militar libanés pidió a las organizaciones palestinas la adopción de medidas que aceleren el despliegue de los soldados.
Hasta ahora las tropas realizaron patrullas por los alrededores y las principales entradas del campamento, a la espera de que sea factible ingresar sin uso de la fuerza.
El jefe de Inteligencia del Ejército en Sidón, general de brigada Mamduh Saab, observó las operaciones, en presencia del jefe de las Fuerzas palestinas de Seguridad en el Líbano, el general Sobhi Abu Arab.
Con posterioridad, suspendieron la entrada al campamento ante la negativa tanto de Al Fatah como de otras fuerzas de abandonar sus posiciones.
La seguridad de los campamentos de refugiados en el Líbano corre a cargo de las fuerzas palestinas, en virtud de un acuerdo sellado en 1969, en Egipto.
Pese que se incumple en muchos puntos en la realidad, algunos capítulos siguen vigentes.
Source: PL
