Una de las enseñanzas de la guerra siria ha sido la incorporación a los tanques de dispositivos termales de visión nocturna, que han convertido a estos vehículos en aptos para el combate urbano nocturno.
Anteriormente, muchos tanques dependían de sus sistemas de iluminación, pero proteger sus focos del fuego enemigo era imposible, así como la idea de arreglarlos una y otra vez.
Tras dos años de lucha en áreas urbanas, la mayor parte de los tanques habían perdido sus capacidades de visión nocturna.
Al final el centro de investigación del Ejército sirio buscó una solución al problema en 2013. Se instaló entonces en los tanques un sistema término de visión nocturna, que no precisa de iluminación.
Este sistea, llamado Viper-72, ha sido instalado en los tanques del Ejército sirio más antiguos, incluyendo los T-72 y T-55.
Es de destacar que este dispositivo, que es una producción de un centro de investigación científica en Damasco, entró en servicio en las fuerzas sirias hace dos años y ha confirmado las expectativas que se habían depositado en él.
El sensor tiene un alcance de 4 kms y no se ve afectado por lo que aparece en el campo de batalla ni por obstáculos de distorsión. Él permite el descubrimiento incluso de los francotiradores que se esconden.
Este sensor ha permitido a los tanques sirios librar batallas nocturnas en situación de ventaja en las últimas campañas militares en la Guta Oriental, el Sur de Damasco y el Sur de Siria.
También existen otros sistemas de alta tecnología de visión nocturna en los tanques T-90A y T-72B3, que llegaron a Siria posteriormente.
Source: Agencias