Según los informes, más de 1.000 soldados saudíes han muerto desde principios de 2015, cuando el régimen de Riad y una coalición de sus aliados desencadenaron una guerra sangrienta contra Yemen.
El número de muertos se registró después de que más de una docena de fuerzas saudíes murieran durante operaciones transfronterizas recientes contra Yemen, informó Al Yazira el martes, citando a medios de comunicación estatales saudíes.
Se trata de una rara admisión de las bajas militares saudíes, ya que el reino tiene una política de ocultar información sobre las bajas que ha sufrido durante la guerra.
Mientras tanto, las cifras publicadas por el Ministerio de Derechos Humanos de Yemen sugieren que más de 600,000 personas han muerto o han resultado heridas o afectadas en su salud por la campaña de ataques y el bloqueo encabezado por Arabia Saudí, que tiene como objetivo aplastar el movimiento Ansarulá de Yemen y reinstalar a unos antiguos responsables sumisos a Riad en el poder.
El movimiento Ansarulá, respaldado por el Ejército y otras fuerzas yemeníes aliadas, ha estado defendiendo al país frente a los ataques dirigidos por Arabia Saudí.
Las fuerzas yemeníes recientemente intensificaron sus contraataques, llevando sus operaciones a las regiones fronterizas de ese país, donde generalmente llevan a cabo ataques terrestres y de misiles contra posiciones y bases pertenecientes al Ejército saudí.
A lo largo de tres años de guerra, las tropas saudíes muestran señales de cansancio y resentimiento en medio de la prolongada guerra, que no ha logrado alcanzar los objetivos declarados.
“Algunos soldados saudíes ahora están hablando abiertamente de su enojo y resentimiento al ser ignorados por las autoridades”, según el informe.
Source: Al Yazira