Rusia ha opuesto su veto a una propuesta de resolución contra Irán patrocinada por el Reino Unido, y apoyada por EEUU y Francia, en el Consejo de Seguridad de la ONU. La propuesta denunciaba una ayuda militar no probada de los iraníes a Yemen, un país que sufre una agresión desde hace casi tres años por parte de Arabia Saudí y sus aliados, que cuentan con el apoyo militar estadounidense y británico.
Arabia Saudí ha cosechado un sonoro fracaso militar en Yemen y, con vistas a ocultarlo, ha comenzado a culpar a Irán de sus reveses, acusando a ese país de entregar armas a los yemeníes, concretamente al movimiento Ansarulá.
Tales alegaciones fueron bien recibidas por los gobiernos de Washington y Londres, que presentaron una resolución para condenar a Irán por esa supuesta ayuda a Yemen, sin especificar como podrían los iraníes haber enviado tales armas a un país que sufre un severo bloqueo. En lugar de criticar a Arabia Saudí por su agresión contra Yemen, que ha causado la muerte de miles de civiles, una hambruna y la extensión de una epidemia de cólera, EEUU y el Reino Unido han preferido, pues, utilizar el conflicto de Yemen para acusar a Irán y el texto presentado por Londres incluía una condena a Irán por violar el embargo de armas y también condenaba a Ansarulá y al Ejército yemení por lanzar misiles contra el país agresor, Arabia Saudí.
Sin embargo, Rusia ha interpuesto el veto a la resolución anti-iraní en el Consejo de Seguridad, un hecho que ha causado la cólera de EEUU, que había estado presionando a los miembros del Consejo durante meses para que aquella fuera aprobada. El embajador ruso en la ONU, Vassily Nebenzia, señaló que no había ninguna prueba de tal ayuda iraní a Yemen.
Los miembros del Consejo han aprobado, sin embargo, por unanimidad una resolución propuesta por Moscú y que prolonga el embargo de armas a Yemen durante un año más.
La embajadora de EEUU ante la ONU, Nikki Haley, se limitó a decir que “si Rusia continúa apoyando a Irán, EEUU y sus socios deberán actuar solos” sin especificar a qué tipo de acción se refería.
Por su parte, la representación iraní ante la ONU publicó un comunicado afirmando que el comportamiento de la embajadora norteamericana ante la ONU tenía como fin el ocultar los crímenes cometidos por la coalición liderada por Arabia Saudí en Yemen y que sus alegaciones anti-iraníes pretendían ayudar a los agresores en dicho país.
“Irán ha rechazado en varias ocasiones las alegaciones norteamericanas que lo acusan de enviar armas a Yemen y reafirma que los tres años de bombardeos contra ese país han provocado una catástrofe humanitaria”, añade el comunicado.
Source: Diversas