Cientos de manifestantes quemaron la oficina de la Unión Patriótica del Kurdistán, el partido liderado por el ex presidente de la Región Autónoma del Kurdistán iraquí Massud Rabbani, en Erbil, la capital regional, informó a Sputnik una fuente kurda.
“Los manifestantes atacaron cerca de Erbil el edificio de la Unión Democrática de Kurdistán y lo incendiaron”, dijo la fuente al añadir que “la situación en Erbil no es muy buena”.
Poco después, se produjo otro incidente en la localidad de Kavissanjag, también en la provincia de Erbil, donde cuatro agentes de seguridad kurdos fueron muertos y otros siete heridos. Estos hechos se produjeron cuando decenas de manifestantes trataban de entrar en los locales del partido UPK.
Los manifestantes pidieron reformas urgentes en materia política y medios de subsistencia para las diferentes regiones del Kurdistán.
Las protestas populares continúan desde el 18 de diciembre también en otra ciudad de la autonomía, Suleimaniyah, y en las localidades de Ranya, Kadri, Kalar, Sayyed Sadegh y Halabya. En esta última, los locales del UPK fueron también incendiados.
El motivo principal para las manifestaciones es la demora de los salarios y el empeoramiento de las condiciones de vida.
El 25 de septiembre pasado, el Kurdistán iraquí celebró un referéndum el que un 93%, según datos oficiales kurdos, votó por separarse de Iraq y proclamar la independencia.
Bagdad calificó de ilegal la consulta popular y aprobó una serie de sanciones contra la autonomía kurda.
La semana pasada, Bagdad señaló que no habrá ninguna conversación con el Kurdistán iraquí hasta que sean cancelados los resultados de la consulta independentista.
Source: Sputnik