El emir de Qatar dijo el martes que su país estaba “mil veces mejor sin” los estados árabes que rompieron relaciones con él e impusieron un embargo en Doha hace cinco meses.
En un discurso ante una asamblea consultiva llamada Maylis al Shura, el jeque Tamim bin Hamad al Thani dijo que su gobierno había puesto en marcha planes de contingencia para toda la duración de la crisis.
“No tememos el boicot de los países del bloqueo y estamos mil veces mejor sin ellos”, dijo señalando: “Se requiere continuar la vigilancia”.
El joven emir dijo que su gobierno estaba trabajando en “una serie de proyectos para garantizar la seguridad alimentaria” y “prestar especial atención al agua”.
Irán, Turquía y, más recientemente España, han ayudado a Qatar con las importaciones de alimentos desde el comienzo de la crisis del Golfo.
La crisis estalló el 5 de junio, cuando Arabia Saudí, los Emiratos Árabes Unidos, Bahrein y Egipto rompieron las relaciones diplomáticas y cerraron sus fronteras con el pequeño emirato, acusándolo de apoyar a los grupos extremistas y acercarse a Irán
Qatar rechazó las acusaciones diciendo que sus opositores estaban tratando de poner su política exterior “bajo tutela”. Desde entonces, la crisis ha continuado sin perspectivas de solución, a pesar de los intentos de mediación kuwaití y estadounidense.
Desde 1981, Qatar, los Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí, Bahrein, Omán y Kuwait se han agrupado en el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG). Debido a la crisis, existe una considerable incertidumbre sobre la celebración de la cumbre anual del CCG de diciembre en Kuwait.
El emirato ha sido designado por el organizador de la FIFA para albergar el fútbol de la Copa del Mundo 2022.
En este sentido, Sheij Tamim se rebeló contra los intentos de los oponentes de Qatar de hacer descarrilar la Copa del Mundo y dijo que los grandes proyectos de infraestructura continuarían.
Source: AFP